EMIGRACION CUBANA.
Estudios científicos muestran que nuestra especie se originó en África Oriental hace más de 60.000 años. Y también que desde allí, nuestro antepasado primitivo emigró en oleadas sucesivas al resto del planeta. Estudiosos de épocas pasadas habían hecho aproximaciones sobre las rutas migratorias, al examinar piezas arqueológicas y huesos de nuestros antepasados. Hoy, las investigaciones genéticas de las últimas décadas, en particular las auspiciadas por la National Geographic Society, junto con la IBM y la colaboración de entidades científicas de varios países han disipado toda duda acerca de las rutas migratorias del hombre primitivo.
Desde África avanzaron hacia el sur y el oeste de ese continente y de allí a Europa. Otras migraciones se dieron desde Europa, hasta los países nórdicos, mientras otras avanzaron por el Medio Oriente y Asia, y aun otras fueron hacia Australia y Polinesia
Desde su remoto origen en África Oriental un gran migrante ha sido el hombre . Hoy, el mapa migratorio nos hace ver, a más de sus rutas, cómo ciertas migraciones se cruzaron y entrecruzaron, dejando en cada zona poblaciones cuyas mutaciones genéticas nos han revelado al fin su procedencia y devenir.
MIGRACION HUMANA
Grandes migraciones de la historia.
La pobreza, la violencia social, las hambrunas, el colapso de unos Estados y la formación de otros nuevos han provocado movimientos masivos de población entre países y continentes contra la voluntad de sus protagonistas. Gente famélica huyendo de grandes hambrunas, personas esclavizadas, minorías étnicas o individudos perseguidos por causas raciales, políticas y religiosas o pertenecientes al bando derrotado en una guerra han sido arrancados de cuajo de sus lugares de origen para iniciar una nueva vida, casi siempre penosa, en otro lugar del mundo. Judíos, palestinos, armenios, griegos, irlandeses, africanos, son algunos de los pueblos que se han visto obligados a errar por el planeta en algún momento de su historia.
El Éxodo es el segundo libro de la Biblia. Se trata de un texto tradicional que narra la esclavitud de los hebreos en el antiguo Egipto y su liberación a través de Moisés, quien los condujo hacia la “Tierra Prometida”. La gran hambruna del periodo 1846-1850 provocó que dos millones de irlandeses de un total de siete millones emigraran a Gran Bretaña o a Estados Unidos.
En la España medieval los judíos constituyeron una de las comunidades más prósperas de su historia, tanto bajo el dominio musulmán como, posteriormente, en los reinos cristianos, antes de que en 1492 fuesen expulsados durante la Inquisición por Fernando e Isabel, los Reyes Católicos . Esa fecha marcó el destierro definitivo de un pueblo que vivió en la Península cientos de años antes de ser echados. En la actualidad 12.000 judíos viven en España y los descendientes de los judíos españoles, los sefardíes, constituyen aproximadamente un quinto de la población judía mundial.
Pero pocos episodios de traslados forzosos de grandes contingentes humanos ha habido tan crueles y a la vez tan determinantes para la redistribución del mapa demográfico mundial como el comercio de esclavos africanos, llamado trata de negros, que tuvo lugar entre 1500 y 1850, durante la colonización de América por las naciones europeas. Los descubridores del Nuevo Mundo intentaron en principio usar a los indígenas para explotar las plantaciones y minas, pero ante el escaso rendimiento de éstos, que fueron diezmados por las enfermedades, recurrieron a esclavos negros importados de África.
La Guerra Civil española condujo al exilio a casi un millón de personas, la mayoría de ellas hacia Francia y América Latina, y durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis desplazaron a cerca de doce millones de europeos entre ellos polacos, rusos, franceses, belgas, holandeses y otros para realizar trabajos forzados en Alemania. Después, cientos de miles de judíos abandonaron la URSS, Polonia, Alemania y Austria con destino a América o al nuevo estado de Israel, y millones de alemanes tuvieron que expatriarse tras los cambios de fronteras.
MIGRACION DE JUDIOS A PALESTINA 1947.
También Asia ha sido escenario de migraciones forzadas. En 1947, la independencia y división del subcontinente indio en dos estados -India (hinduista) y Paquistán (musulmán) provocaron el desplazamiento por motivos religiosos de dieciséis millones de personas, mientras cuatro millones de coreanos tuvieron que emigrar por la partición de su país en dos estados. Parecida circunstancia dejó sin tierra a dos millones de palestinos que, con nutrida presencia en Jordania, Siria y Líbano, constituyen la población de refugiados más antigua, todavía hoy una cuarta generación sigue viviendo en los campamentos que levantaron sus bisabuelos.
La inmigración italiana en Argentina se refiere al movimiento migratorio más numeroso e importante que recibió la República Argentina. Se trata de la mayor comunidad europea en el país, incluso superando a la española. Unos tres millones de italianos llegaron a la nación austral, asentándose esencialmente en las regiones centrales del territorio argentino. Argentina posee la mayor comunidad de italianos fuera de Italia en el mundo. Desde 1814 hasta 1970 llegaron contingentes de inmigrantes de todas las regiones de Italia.
MIGRACIONES DECADA DE 1990.
Concepto de Emigración.
La emigración consiste en dejar el lugar de origen para establecerse en otro país o región, especialmente por causas económicas o sociales. Forma parte del concepto más amplio de las migraciones de población, las cuales abarcan tanto la emigración (salida de personas de un lugar o país para establecerse en otras partes) como la inmigración (personas llegadas de otras partes). Podría decirse que la emigración termina donde comienza la inmigración. Los países que registran más inmigración en la actualidad son los pertenecientes al denominado Primer Mundo o países desarrollados, aunque en otras épocas históricas fueron los asiáticos quienes emigraron a otros continentes en busca de una vida mejor y mucho antes, los africanos y asiáticos que durante siglos y hasta miles de años, buscaron nuevos lugares de otros continentes donde establecerse. No es secreto que la emigración china, con su presencia en casi todos los países del mundo, es la más extendida.
Las migraciones han sido constantes desde tiempos antiguos, pero las que se desarrollan a principios del siglo XXI no tienen precedentes. Las migraciones internacionales se han mundializado, aunque en un planeta crecientemente globalizado, la movilidad de las personas se ha visto severamente restringida.
En la primera década del siglo XXI hay casi 210 millones de personas que viven fuera de su país de origen, según las Naciones Unidas. Entre 1750 y 1950, unos 70 millones de personas abandonaron Europa en busca de una vida mejor. Paradójicamente, Europa, uno de los continentes de mayor emigración hacia el resto del mundo, impone hoy políticas restrictivas y homofóbicas para los inmigrantes del resto del mundo. Olvidaron que una parte importante de la población europea se ha trasladado de región, de país e incluso de continente en varias ocasiones.
Durante los siglos XIX y XX se produjeron masivas migraciones.
En una primera oleada partieron hacia Estados Unidos y Canadá europeos de los países del centro y norte de Europa: Reino Unido, Alemania, Irlanda, Suecia, Noruega... En el último tercio del siglo XIX se unieron europeos de los países del sur y este de Europa, sobre todo de Italia, España, Portugal, Polonia e Imperio Ruso. Éstos ampliaron el espacio inmigratorio abarcando también a la zona central y sur de América: principalmente Argentina y Brasil.
El gran crecimiento de la emigración se asocia a las primeras fases de la industrialización, que produjeron cambios demográficos y modernización económica. Por ello los países del centro y norte de Europa, al ser los primeros en industrializarse, se vieron antes afectados por este fenómeno que los del sur y este, con una industrialización más tardía. El desarrollo de los transportes y comunicaciones ayudó a que los traslados fuesen más rápidos y cómodos. La internacionalización del mercado favoreció la llegada de productos del “Nuevo Mundo”, principalmente cereales, a precios muy competitivos. Esto provocó pérdidas en el sector agrario europeo, que en ocasiones derivó en crisis, impulsando a la población a emigrar. Su principal destino fue América.
Los inicios de la industrialización en América del Norte, un continente prácticamente despoblado, ofrecía múltiples oportunidades de inversión y de trabajo a la población del centro y norte de Europa, primeros afectados por los procesos de industrialización.
Cuando a finales de siglo América del Sur se integró en el sistema del comercio internacional, especializándose en la exportación de productos agrarios, la oferta de trabajo se amplió y atrajo a la población del sur de Europa, que en ese momento iniciaba el proceso de modernización económica
La crisis económica de 1929, que ponía en entredicho el sistema capitalista, desestabilizó a la sociedad europea y al sistema político democrático. Fruto de esta crisis fue la aparición de regímenes políticos autoritarios: el fascismo italiano, el estalinismo soviético y el nazismo alemán.
LA SEGUNDA MUNDIAL PROVOCO UNA GIGANTESCA OLA DE EMIGRACION.
La segunda ola migratoria tuvo carácter forzoso y se extendió desde la Primera Guerra Mundial hasta finales de los años cuarenta:
Después de la Primera Guerra Mundial cambiaron de país siete millones y medio de europeos por la modificación de las fronteras. Alemanes, polacos y griegos fueron los más afectados. Por las mismas fechas, debido al triunfo del régimen comunista en el Imperio Ruso (1918) y a una guerra civil posterior, huyeron de la URSS dos millones de personas, a pesar de las fuertes medidas para evitarla.
El triunfo del régimen nazi en Alemania (1933) y la represión subsiguiente contra los judíos y los sectores políticos democráticos, impulsó la huída de más de quinientos mil alemanes. La victoria de las fuerzas franquistas en la Guerra Civil española (1936-1939) y el régimen dictatorial que impuso en España, forzó a exiliarse a más de quinientas mil personas.
Durante la Segunda Guerra Mundial unos cincuenta millones de europeos fueron deportados, exiliados o expulsados. Los alemanes obligaron a ocho millones de europeos residentes en los países ocupados (URSS, Polonia, Francia y otros) a trabajar en campos de concentración en Alemania.
Después de la Segunda Guerra Mundial, más de catorce millones de personas tuvieron que trasladarse forzosamente por la modificación de las fronteras.
CHINATOWN, EL BARRIO CHINO DE SAN FRANCISCO.
Los movimientos de redistribución han sido muy importantes en la segunda mitad del siglo XX, aunque el escenario de las migraciones ha ido cambiando. Se pueden establecer dos grandes bloques de emigración:
-La que tiene origen en los países mediterráneos y se dirige hacia el norte y centro de Europa (1950-1975)
-La que va de este a oeste, y alcanza incluso a los países mediterráneos (1990-2000)
La razón principal fue la diferencia económica entre los países europeos. Después de la Segunda Guerra Mundial Europa había perdido el liderazgo mundial, tanto político como económico, ahora detentado por Estados Unidos; pero los países de la Europa occidental y central poseían un índice de desarrollo muy superior al de las zonas mediterráneas y orientales.
Para la población de los países mediterráneos fue una inmejorable oportunidad para mejorar su situación económica. Los receptores obtenían mano de obra barata. Para los emisores fue una válvula que liberó presiones sociales (mucha población joven y en paro) y con el dinero recibido por los emigrantes se pudieron modernizar los países.
OLA MIGRATORIA POR EL DERRUMBE DEL CAMPO SOCIALISTA.
Las migraciones este-oeste se originaron por el derrumbamiento del régimen comunista (1989). En la antigua URSS y en los países de Europa, que hasta entonces tenían régimen comunista, se inició la liberalización política y económica.
Como a partir de entonces podían trasladarse libremente de un país a otro, se originó una importante redistribución de población:
La fracción de la antigua URSS en varios países independientes, supuso el cambio de residencia de más de tres millones y medio de personas entre 1991 y 1996. El segundo país más afectado fue Alemania, que recibió importantes grupos de población de origen alemán y retenidas en la zona del Este hasta ese momento.
Pero, aparte de esta redistribución, la Europa occidental se convirtió en centro de atracción económica. Las diferencias de desarrollo estimularon a la población de los países más pobres del este a trasladarse a los de la Unión Europea.
Unas décadas antes, la independización de los países coloniales provocó grandes movimientos migratorios. A Gran Bretaña llegó sobre todo población de Kenia, India y Malasia. A Francia, Italia y España de los países del Norte de África. A Bélgica del Congo, actual República Centroafricana y a Portugal de Angola y Mozambique.
Con la globalización económica, en los países pobres no hay prácticamente expectativas de mejora económica: desde luego no la hay en los sectores industriales, a cuya tecnificación no pueden acceder los países menos desarrollados, pero tampoco puede mejorar el sector agrícola, por la falta de suelo cultivable, la mecanización de la producción y la influencia del mercado mundial. A ello se suma el fuerte crecimiento demográfico de los países pobres, que duplica o triplica al de los países ricos, y que reduce aún más la posibilidad de conseguir empleo.
Los países desarrollados temen la llegada incontrolada de población del Tercer Mundo en busca de trabajo, y, para evitarlo, han impuesto políticas inmigratorias muy restrictivas, que dificultan la llegada libre de extranjeros y criminalizan a los que consiguen instalarse en el mundo desarrollado sin pasar por el filtro establecido por sus leyes.
Sin embargo el envejecimiento de la población de los países desarrollados se ampliará en los próximos años. La Unión Europea con 25 países tiene unos 460millones de habitantes, pero se prevé que en 2050 la cifra se recortará a 400 millones. Si se cumplen las previsiones, habrá puestos de trabajo sin cubrir y servicios que no se podrán ofrecer. La sociedad del bienestar y la economía entrará en una fase de estancamiento o de recesión.
MASIVA EMIGRACION ESPAÑOLA A CUBA .
La Emigracion en Cuba
Emigracion Española a Cuba.
Por supuesto que la emigración Española a Cuba comenzó en 1492 con el descubrimiento de la isla, o más bien en 1510 cuando arriba la expedición conquistadora de Diego Velázquez. Bajo el régimen colonial del Imperio Español, la política inmigratoria de Cuba fue el fruto de una transacción entre las exigencias de la industria azucarera de proveer mano de obra barata y la posición tradicional española, según la cual "era deseable poblar las colonias con blancos, siempre a condición que vinieran del lugar adecuado y profesaran los correctos sentimientos religiosos". Para satisfacer las necesidades de los productores de azúcar, se introdujeron esclavos africanos, cuya migración forzosa continuó hasta 1873. Ante la inminencia de la abolición, se trajo a Cuba culis chinos contratados en condiciones que no se diferenciaban mucho de la esclavitud. Entre 1842 y 1873 entraron en Cuba 221,000 esclavos africanos y 124,800 chinos.
La élite criolla de Cuba aspiraba a atraer inmigración blanca como alternativa a la esclavitud y las dos fuentes principales de inmigrantes potenciales, que correspondían también a las exigencias ideológicas del gobierno colonial, eran España peninsular y las Islas Canarias. Los peninsulares preferían establecerse en los centros urbanos y trabajar en el comercio, mientras que los canarios se radicaban en las áreas rurales, donde muchos llegaban a ser mayorales en los ingenios azucareros.
España no tuvo parte en las migraciones masivas con rumbo a los Estados Unidos durante la década de 1880. Sus emigrantes preferían dirigirse a América Latina, por lazos de familia, lenguaje, religión y mentalidad. Según estadísticas españolas, el país de destino más importante elegido por emigrantes era Cuba. Entre 1882 y 1898, un total de 508,455 personas que zarparon de España declararon que se dirigían hacia Cuba, si bien cabe suponer que no todos tenían la intención de radicarse allí; una parte de ellos pertenecía a la administración colonial, al ejército o al clero.
Pero la emigración española no se interrumpió al concluir el dominio colonial. Entre 1899 y 1923, más de 750,000 emigrantes españoles se dirigieron hacia Cuba, muchos de ellos volvieron a su país natal, pero alrededor del 40% se radicó en la isla, una cifra considerable de unas 300 mil personas, con gran incidencia en la población total.
Fue de gran importancia la Ley de Inmigración y Colonización, publicada por el presidente Tomás Estrada Palma el 11 de julio de 1906, que autorizó una partida presupuestaria para la promoción migratoria de las Islas Canarias y de Europa, y prohibió la exportación de braceros cubanos al exterior, con el propósito de poblar las regiones rurales con familias colonizadoras y proveer obreros para la industria azucarera.
Del mismo modo, el número de agricultores europeos radicados en Cuba como consecuencia de la política migratoria fue muy reducido; algunas familias rusas y noruegas se radicaron en Oriente, dedicándose al cultivo de naranjas. Hasta un grupo de norteamericanos establecieron colonias en el norte de la provincia de Camaguey y en Isla de Pinos.
Pero el principal grupo de inmigrantes provenía de España: de los 309,521 inmigrantes que entraron en Cuba durante los primeros 10 años de la independencia, más del 80% eran españoles. Los emigrantes españoles, procedentes de las zonas rurales de Galicia y Asturias, abandonaban la agricultura al establecerse en Cuba y, aun dirigiéndose a las nuevas regiones de desarrollo azucarero en Camaguey y Oriente, tendían a radicarse en los centros urbanos. Atraídos por la numerosa colonia española, que dominaba el sector comercial de la economía cubana, dichos inmigrantes encontraban trabajo en establecimientos de comercio y fábricas pertenecientes a familiares que les habían precedido, o a través de los "Centros Regionales", asociaciones de ayuda mutua creadas por oriundos de las distintas regiones españolas, que, además de proveer asistencia médica y social, servían como agencias de trabajo.
Teniendo en cuenta que en 1899 la población total de Cuba era poco más de un millón y medio habitantes, de ellos unos 200,000 habían nacido en España, la masiva emigración española de casi tres cuartos de millón de personas añadió un aporte vigoroso a la nación no sólo en el aspecto humano, sino también en el orden social, económico, político, cultural y hasta religioso. El español, además, ha ayudado al desarrollo de la isla, al mismo tiempo que las sociedades mutualistas han beneficiado a muchos asociados cubanos (estas sociedades cooperativistas y otras formas de asociación llegaron a reunir el 90% de la colonia española), tales como los Centros Gallego, Asturiano, Canario, Castellano, etc., que ofrecían “todas las facilidades de un club social, instrucción gratis y asistencia médica libre de gastos. Las cuotas sociales, que no pasaban de $2.00 al mes permitieron que los fondos fueran también empleados, en los casos del Centro Asturiano y el Centro Gallego, en construir magníficos edificios en el centro de La Habana y para edificar y mantener varias escuelas y algunas de las mejores clínicas y hospitales de Cuba. De este tema hablamos en artículos anteriores.
La energía y determinación del emigrante español, particularmente, puesto que hubo otros grupos de emigrantes de diversas procedencias, se repartió por toda la isla, y contribuyó al desarrolló y la recuperación nacional en todas las ramas de la economía.Por otro lado, gran parte de ellos se casaron con cubanas, lo que hizo que aumentara la población blanca, que era una intención de presidente Estrada Palma y los consiguientes presidentes que le sucedieron, lo que hizo que en 1943, constituía el 75% de los habitantes.
Hoy en día la mayor parte de los extranjeros piensan que Cuba siempre fue un país mayoritariamente de raza negra o mestiza y se extrañan de conocer cubanos blancos.
Un drama en silencio.
En los 55 años de un supuesto paraíso de obreros y campesinos, más de dos millones de cubanos se han marchado de su patria. El 22% de la población.La migración constituye hoy una pieza clave de la realidad cubana. Buena parte del consumo familiar depende de las remesas, mientras que el Estado compensa sus crónicos déficits financieros imponiendo una serie de pagos leoninos por productos y servicios.
Estuve leyendo el retórico y cínico editorial del diario Granma donde se subraya, que, “la política migratoria de Cuba, a lo largo de todos estos años de revolución, se ha basado en el reconocimiento del derecho de los ciudadanos a viajar, a emigrar o residir en el extranjero y en la voluntad de favorecer las relaciones entre la Nación y su emigración”.
Decenas de miles de cubanos, a través de todas las épocas y por las más disímiles motivaciones, decidieron salir del país temporal o definitivamente y, lógicamente, uno de los principales destinos fue los Estados Unidos. Recuerdo que mi padre, al quedar cesante en el Ministerio de Obras Públicas por el cambio de gobierno, al acceder Batista a la presidencia del país por un golpe de estado, junto con otro compañero de trabajo decidieron ir a buscar fortuna a Tampa, por entonces bastión fuerte de los cubanos en Estados Unidos. En 1892, José Martí fundó en Estados Unidos, donde vivió 14 años, el Partido Revolucionario Cubano, organización rectora de la segunda guerra de independencia de Cuba, que estalló el 24 de febrero de 1895. A ese país se podía ir sin visa, por 29 días, regresar y nuevamente ir al día siguiente. Así trabajaban en el vecino del norte muchos cubanos, y tampoco era difícil obtener una residencia allí.
Pero con la revolución, todo cambió.
En los primeros años se iban a Estados Unidos dueños de negocios e integrantes de la próspera clase media y alta que en 1959 había en Cuba. Luego comenzaron a irse los 'hombres nuevos' de la Revolución, desde militares y funcionarios, hasta médicos y deportistas. O simples obreros, ahogados por las penurias económicas y falta de libertades. En un principio, era una migración marcadamente política, y estos primeros inmigrantes politizaron toda la matriz de inserción posterior, haciendo del anticastrismo oficio y religión. Aunque los migrantes posteriores se acercaron más a lo que hoy se llama emigración económica, fueron sometidos a vejaciones, expropiaciones y a la estigmatización por parte del Estado cubano, que los consideró antisociales, escorias, apátridas y gusanos. Por ello al comunidad cubana en el exterior ha sido permeada por un fuerte sentimiento anticomunista. Los cubanos emigrados tienden a denominarse exiliados a pesar de que muy pocos lo son realmente. Todos son, sin embargo, desterrados.
Las salidas del país comenzaron a ser manipuladas a semejanza del estilo siniestro puesto en práctica por el llamado socialismo real europeo donde el chantaje y secuestro de familiares se volvió parte de la política migratoria.
El derecho a partir había que ganárselo trabajando en granjas agrícolas y sufriendo constantes vejaciones. Otro aspecto del ensañamiento contra los “gusanos” era dejar que se fuera una parte de la familia y retener al padre o a un hijo, por ejemplo, en dependencia del nivel de crueldad que en ese momento y persona quisiera aplicarse.
BALSEROS CUBANOS, ESTOS SON DE LOS MAS INGENIOSOS.
Durante las cinco décadas y media de autocracia en Cuba, han habido pocos éxodos masivos autorizados por el régimen.
A ello le antecedieron a los principios de la revolución, los 14 mil niños de la Operación Pedro Pan entre 1960 y 1962, los del efímero episodio del puerto de Camarioca en 1965, los de los Vuelos de la Libertad desde el aeropuerto de Varadero y los 125 mil que atravesaron el Estrecho de Florida durante el llamado éxodo de Mariel, en 1980. Otros muchos viajaron a terceros países, como España, México y Venezuela, y después se trasladaron a territorio norteamericano. El episodio de los balseros de 1994 también fue notable. Aunque el tema balseros no ha descansado hasta la actualidad pero sin la masividad de ese momento.
Son de todos conocidos los desmanes del Mariel y las represalias con los familiares de personas que "desertaban" en misiones oficiales al exterior. También las personas que eran condenadas a cárcel por "salidas ilegales". Bueno no es de extrañar esto en un país que metían a presidio a personas por tener en sus poder un dólar.
MITIN DE REPUDIO.
El primer mitin de repudio del que tuve conocimiento fue en mayode 1980. Era un muchacho que trabajaba conmigo y presentó su permiso de salida del país, lo cual le obligaban a llevar a su trabajo, pues se había introducido en la Embajada del Perú, donde hubo un masivo autoexilio de mas de diez mil personas, y que dió en cierta forma origen al éxodo del Mariel. Los secretarios del Partido instaron a todos a vejarlos, gritarles improperios, golpearlos, cosa a la cual me negué a participar junto a muchos otros.
Por aquellos días, los mítines de repudio contra los que aspiraban a escapar del paraíso revolucionario se convirtieron en una deprimente realidad cotidiana. Duraron, ininterrumpidamente y en toda su vileza, desde abril hasta septiembre, cuando las autoridades cubanas cerraron el puerto de Mariel a las embarcaciones provenientes de la Florida. Millares de personas indefensas fueron víctimas del odio orientado por el gobierno. Lanzar huevos a las mismas personas a las que el gobierno había invitado a marcharse del país si no les gustaba su revolución fue una de las constantes de esos actos de masas compulsivos y en muchos casos espoleados por el miedo de los agresores, una reedición tropical de los de la Revolución Cultural en la China de Mao Tse Tung.
Las agresiones y vejaciones entre compatriotas para castigar la disensión es uno de los elementos claves de la naturaleza corrupta de cualquier ideología que las promueva, y constituyen un obstáculo permanente a cualquier posibilidad de reconciliación. Comunicados oficiales criticaron esta práctica cínicamente, ya que fue orientada desde las más altas esferas del estado-partido-gobierno.
Un acto de repudio solo puede tener lugar en una sociedad envilecida, donde el odio es política de Estado.
PUENTE MARITIMO DEL MARIEL, 1980.
Otra vileza fue que las embarcaciones, para poder zarpar de regreso desde Mariel, tendrían que llevarse a bordo a la "escoria" del país: criminales reincidentes y enfermos mentales sacados con prisa de las cárceles y los manicomios; lacras sociales dispuestas a reconocer que lo eran para obtener en las estaciones de policía un salvoconducto con matrícula de barco. La idea era satanizar a todos los que quisieran abandonar el país y confundirlos con este elemento antisocial y además que Estados Unidos cargara con esas personas.
Con la caída del Muro de Berlín y la desintegración de la Unión Soviética como país, el régimen cubano dejó de recibir ayuda económica y se produjo una verdadera hambruna en la isla. Un nuevo éxodo se desató por mar, a partir de 1994.
Los cubanos en los Estados Unidos constituyen la mayor comunidad cubana fuera de su país y la segunda comunidad hispana de los Estados Unidos, después de los mexicanos. En 2013, habia 2 013 155, según la Oficina del Censo de los Estados Unidos.
Alrededor del 70 % de la población cubana en el exterior reside en los Estados Unidos, concentrándose principalmente en el estado de Florida, y también en otros como Nueva York, Nueva Jersey, Luisiana y el Distrito de Columbia. Pero no es de extrañar que en lugares tan remotos como Alaska, vivan casi mil cubanos y en Hawai más de mil quinientos. Según la Oficina del Censo los cubanos tienen el más alto nivel de educación entre los hispanos de Estados Unidos, con 39% de personas con un diploma universitario elemental, entre los nacidos en Estados Unidos. En ese renglón, los blancos no hispanos representan el 30 por ciento.
EMIGRACION CUBANA EN NEW JERSEY.
De lo que han hecho los cubanos en Miami hablaré en un próximo artículo.
Ley de ajuste cubano.
El 2 de noviembre de 1966 el Congreso de los Estados Unidos aprobó la Ley Pública 89-732, “The Cuban Adjustment Act”, conocida en español como la Ley de Ajuste Cubano, que permitía al Fiscal General, ajustar el estatus inmigratorio que tenían los refugiados cubanos que se encontraban en los Estados Unidos.La situación de limbo que padecían muchos de los cubanos que habían llegado a los EE.UU. antes de 1966 y el no tener una solución para el ajuste legal de los que comenzaron a venir en los vuelos de Varadero, obligó en la práctica al Congreso norteamericano a implementar y aprobar esta Ley, permitiéndo que tanto los cubanos que se encontraban en los Estados Unidos, como los que llegarían por el “Puente Aéreo” pudieran solicitar la residencia permanente.
Según esta ley, toda persona nacida en Cuba, su cónyuge o hijos menores de 21 años, son elegibles para obtener la residencia permanente en Estados Unidos después de permanecer físicamente en el país por un año. Para atenerse a esta ley, una persona tiene que cumplir con los requisitos de:
-Probar que es nacional o ciudadana de Cuba.
-Haber entrado legalmente a Estados Unidos.
-Haber estado físicamente en Estados Unidos durante un año.
-No tener impedimentos por cargos criminales u otras razones que rindan a la persona inadmisible a Estados Unidos, como haber participado en persecuciones de individuos por motivos de sexo, nacionalidad, ideales políticos, o por pertenecer a grupos específicos.
La política de pies secos.
Los pies secos, es decir, los que consiguen pisar tierra de Estados Unidos, podrán solicitar, a tenor de la Ley de Ajuste Cubano, la tarjeta de residencia permanente al año y un día a contar desde el momento de la entrada al país. Mientras tanto, podrán solicitar un permiso de trabajo, pagando los aranceles correspondientes, y la licencia de manejar.
Antes de conceder la green card, Estados Unidos hará las investigaciones pertinentes para evitar conceder la residencia permanente a personas con historial criminal.A su vez los pies con polvo son los cubanos que viajan a México y desde allí entran a Estados Unidos por los estados fronterizos. Por el paisaje de desierto se les llama así.
Ya son casi 50 años de esta muy marcada diferencia entre los cubanos y otros inmigrantes del resto del mundo. A los cubanos se les dio la preferencia porque huían de un gobierno comunista y serían perseguidos políticos si los devolvieran a la isla. El resto de los inmigrantes del hemisferio vienen huyendo de la pobreza y eso los convierte en inmigrantes económicos y por ende no tienen un trato preferencial.
Así de sencillas eran las cosas hace varias décadas. Pero hoy día, ya hace mucho tiempo que los cubanos que vienen a Estados Unidos no lo hacen solamente por motivos políticos. Después del puente marítimo del Mariel en 1980 y aún más los que han llegado en los últimos 20 o 25 años vienen aquí en busca de una vida mejor; lo mismo que hacen los inmigrantes del resto de los países del hemisferio. Pero se mantiene la diferencia de que el cubano continua sometido a un régimen que no impera en ninguna otra parte, ni se avizora, aún con los recientes cambios, incluyendo la supuesta normalización de relaciones entre Estados Unidos y Cuba, ninguna solución esperanzadora para el pueblo cubano.
Muchos cubanos residentes o ciudadanos americanos critican esta ley porque muchos cubanos viajan a Cuba a ver a sus familiares. Casi la totalidad de los que tienen ese criterio, son de edad avanzada y no tienen ningún familiar en Cuba, si lo tuvieran no pensarían así, además la mayoria de los mencionados no han vivido 50 años en un país del cual pueden tener criterios negativos, pero como no lo vivieron no pueden tener una valoración exacta de la magnitud del problema. Como dice el cuento del inmenso Alvarez Guedes, donde un hombre iba a todas partes con un busto de Martí: a la cola del pan, a montarse colgado de una guagua, a las citaciones obligatorias para reuniones y marchas. Alguien le preguntó: ¿Por que andas a todas partes con Martí? Su respuesta fue: ¿El no lo soñó? Ahora que lo viva.
Ley de Memoria Histórica.
En los últimos tres años ha aumentado considerablemente la cantidad de cubanos con nacionalidad española que solicitan refugio a su llegada al aeropuerto de Miami. Las personas con pasaporte español y de países integrados en la Unión Europea no necesitan visado para entrar a Estados Unidos, solo un documento o waiver con el programa ESTA (Electronic System for Travel Authorization).
Más de 180 mil cubanos se han naturalizado como españoles al amparo de la Ley de la Memoria Histórica, conocida como Ley de Nietos, que entró en vigor en diciembre del 2008. Muchos de los llamados “cubañoles” han usado la ciudadanía obtenida como trampolín para viajar sin los requerimientos de visado y radicarse en Estados Unidos.
La mayoría de estos residentes en el extranjero no son españoles emigrantes, sino el resultado de las solicitudes de nacionalización tramitadas años atrás en aplicación de la llamada 'Ley de Nietos', que forma parte de la Ley de Memoria Histórica. Ésta reconoce “el derecho a la nacionalidad española a aquellas personas cuyo padre o madre hubiera sido originariamente español y a los nietos de quienes perdieron o tuvieron que renunciar a la nacionalidad española como consecuencia del exilio”.
En Cuba residen actualmente 108.858 españoles, Antes de la promulgación de la Ley de la Memoria Histórica, en Cuba residían poco más de 28.000 personas. Mi esposa tuvo la suerte (y la perseverancia también) de vencer todos los trámites y convertirse en ciudadana española. Yo podía haberlo hecho también, pero no contaba con la documentación de ninguno de mis abuelos y se me hizo más lejano el lograrlo, aunque ahora me doy cuenta que aunque con trabajo también lo hubiera conseguido. Eso permitió que viniera a México y fuera a Miami sin visas, como ciudadana de un país que no es, como el cubano, un indeseable.
PASO FRONTERIZO ESTADOS UNIDOS-MEXICO.
Frontera
La llegada de cubanos a Estados Unidos por la frontera mexicana suma ya más de 14,000 personas durante el año fiscal 2014, una cifra que constituye récord histórico en el flujo ilegal de ciudadanos de la isla a través de los puntos de control migratorio del país.
Mis dos hijos entraron a Estados Unidos por esta última vía: La frontera mexicana, pero con diferente suerte.
Alexander entro en diciembre de 2006, cuando viajó desde Córdoba, Argentina, al aeropuerto de México D.F, y de allí a Matamoros, donde, haciendo uso de su dominio del inglés, acompañó a un grupo de norteamericanos que iban a cruzar el paso fronterizo y entre ellos pasó inadvertido para los policías mexicanos, y al llegar a la posición norteamericana solicitó acogerse a la Ley de Ajuste Cubano.
Carlitos sin embargo, tuvo la poca suerte de que en su vuelo hasta Matamoros, fuera un grupo de cubanos procedentes de España, por lo que él y los citados fueron conducidos por la policía mexicana, la que les dijo textualmente: sabemos a que ustedes van y se lo hacemos fácil o se lo hacemos difícil. Lo despojaron de todo objeto de valor y de todo el dinero que llevaba y una vez esto lo condujeron a la garita norteamericana donde no tuvo ningún problema para obtener su parolee.
De ahí el porqué de la reacción de esos oficiales que con cierta envidia y demás sentimientos que caracterizan a quienes tienen prejuicios con los cubanos logran entrar a Estados caminado como perro por su casa, beneficiados por una ley que ellos quieren ignorar.
El drama migratorio cubano le da comida a mucha gente ajena a los sufrimientos del pueblo cubano.
Se puede afirmar que de todos los errores de la Revolución, entre ellos la concentración del poder absoluto en una sola persona, junto a la eliminación de los poderes independientes del estado, del estado de derecho y del sistema político democrático, mantener la explotación asalariada en las empresas estatizadas con un capitalismo monopolista de estado, hablando falsamente de un estado sin clases, controlar para el estado-partido-gobierno todos los medios de información y comunicación, impidiendo la libertad de expresión, la determinación personal de Fidel en hechos desastrosos, desde la Crisis de Octubre que puso al mundo al borde del holocausto nuclear, la zafra de los 10 millones, el cordón de La Habana, los gigantes planes ganaderos y lecheros todos enfermos de voluntarismo; las Secundarias y Pre-Universitarios en el campo, el envío de miles de tropas y armamentos a conflictos lejanos, la homofóbica UMAP, el Quinquenio gris, la represión de las actividades religiosas, y otros tantos, la peor de todas ha sido la cruel y despiadada política migratoria que destruyó la unión y la felicidad de las familias cubanas. Yo sufrí en carne propia con mi padre esa política, de lo cual hablaré pronto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario