El uso del idioma y la educación en México.
"¡Pobres mexicanos! Que cada 15 de Septiembre gritan por un espacio de una hora quizá para callar el resto del año".
Octavio Paz
Cada pueblo hace del lenguaje un patrimonio muy propio, el cual va cambiando y reformándose con el paso del tiempo, tanto que en algunos aspectos puede volverse indescifrable para otras personas que hablen la misma lengua.
Eso lo comprobamos los cubanos cuando emigramos, incluso a países hispanohablantes. Si queremos adecuarnos a un entorno donde somos minoría, o incluso somos los únicos, tenemos que asumir las mismas palabras que conocíamos pero ahora con el sentido que la mayoría les da, o incorporar nuevas, incluidas las llamadas "malas palabras". A lo que en Cuba acostumbrabas llamarle de una forma verás que en otras tienen otra connotación, o palabras normales en Cuba se consideran feas en otras tierras.
Cambiar de una denominación a otra tampoco plantea un conflicto de identidad nacional sino por el contrario, ganas y contrastas vocabularios, alternas códigos, comparas la lengua que hablabas antes con la que hablas ahora. Y además razonas que en tu propio país el vocabulario también va cambiando. De "pollo" se pasó a "lea" y después a "jeva" para denominar a una mujer. De "socio" se pasó a "compadre" y después a "asere" para denominar a un amigo.
A veces es imposible conocer el origen exacto de cada palabra: algunas ya son metáforas muy gráficas de lo que representan. Otras veces ocurre que para explicarse su uso hay que recurrir a lecturas y bibliotecas, o hasta repasar la historia. Y quizás en muchos casos no encuentres el origen por ninguna parte o tengas que hacer alrededor de él mil conjeturas.
Pero sin duda cuando un cubano llega a México, aún dominando todas las premisas que hemos comentado, le choca tremendamente el, para nosotros, incorrecto empleo del idioma, que además, cuando conversa con una persona culta ni por asomo dicen ninguna de esas palabras y utilizan muchas que en el habla popular no son ni conocidas y que no implica que ellas sean elitistas, sino simplemente que el vocabulario popular es pobre, resultado de una educación muy pobre.
Veamos algunos ejemplos, inexplicables para el que no viva en México.
-Me late: ( asumo que venga del latir o el palpitar del corazón) , o sea que es una presunción suposición, o en su acepción más inadecuada, que algo te gusta mucho.
-Pelo chino. La expresión cabello chino sólo existe en México, ya que los chinos tienen el cabello lacio y no rizado como se define el pelo chino.
-Alberca En algunos países, particularmente México, se utiliza la palabra alberca, de origen árabe, en vez de piscina, de uso universal. Alberca ha quedado en España exclusivamente para algunos depósitos de agua, no para la natación sino con fines agrícolas, principalmente en Andalucía por su influencia morisca.
-Levantar en México es secuestrar. Levantar es poner una cosa o a una persona en una posición alta o más alta de la que tenía. Poner derecho o en posición vertical lo que está caído o tumbado, dar mayor volumen a la voz, robar, sublevar, edificar, suprimir prohibiciones o penas, atribuir falsamente, ponerse de pie, dejar la cama, sobresalir, pero en ningún caso es secuestrar, salvo en México.
-Luego luego. Se entiende como "después", sin embargo en México quiere decir inmediatamente, desde luego : ciertamente, indudablemente, sin duda alguna
-Platicar. Hablar puede relacionarse con un monólogo o con otra persona y conversar o charlar es cuando una persona se comunica mediante la palabra con otra o varias personas. Sin embargo platicar es una expresión casi inexistente y de uso exclusivo en México.
-Sillón. Un sillón es un asiento con respaldo, implicando apoyos laterales para los brazos, comúnmente llamados con el mismo nombre: brazos o apoyabrazos. Sofá es un asiento para más de una persona, con brazos y respaldo, cómodo y generalmente mullido. Sin embargo en México se le dice sillón al sofá.
-Ocupar es llenar un espacio o tiempo, apoderarse de algo, obtener un empleo o cargo, habitar, dar empleo o dedicarse a atender a algo o a alguien. En México se usa en lugar de utilizar, usar, necesitar o emplear.
-Ahorita. Ahora indica el momento mismo en el que se habla o se escribe.
Ahorita ndica un momento muy próximo al presente, inmediatamente antes o después del momento en el que se habla o escribe. En México es completamente a la inversa.
-Harto viene del verbo hartar, o sea, satisfecho, lleno, cansado, fastidiado .
en México lo usan para decir mucho, por ejemplo tengo harta hambre, tengo hartos lápices o hartas cosas...
-Demasiado. Que supera en cantidad o intensidad lo conveniente o lo necesario. Indica que la acción denotada por el verbo se produce en una intensidad o grado mayor del necesario, del que se esperaba o del que se considera conveniente. En México se usa incorrectamente en lugar de "mucho", por ejemplo; "te quiero demasiado".
-Aventar. Realmente es echar al viento alguna cosa, empujar al viento. Sería mejor decir: tirar o botar.
-Voltear es hacer dar vueltas en el aire a una persona o una cosa o dar la vuelta a una cosa de modo que quede en una posición opuesta a la que tenía. No está incorrecto pero sería mejor virar, girar.
-Chillar es dar chillidos las personas o los animales o levantar mucho la voz por costumbre o por enfado. En ningún momento está relacionado con llorar como se usa en México.
-Apañar. Es limpiar y poner en orden o en las condiciones adecuadas o resolver una situación difícil o problemática con habilidad y eficacia, hacer que una cosa estropeada deje de estarlo y vuelva a funcionar o a ser útil, especialmente si es de manera improvisada y para salir del paso, Otra acepción es disculpar o proteger a una persona que ha cometido una falta para que no sea descubierta.
En México significa cuando una pareja se besan, se tocan, pero sin llegar al sexo.
-Barda en México es una valla, cerca tapia o muro que rodea algo para dividirlo o protegerlo. Su correcta acepción es cubierta de ramaje, espinos, paja, broza, etc., que se pone sobre las tapias de huertos y corrales, o la armadura con que se protegía a los caballos en la guerra.
-Bodega se puede aceptar como un almacén aunque su verdadero significado esta relacionado con el vino, es un lugar, generalmente subterráneo, en el que se cría y se almacena el vino o establecimiento en el que se vende vino y otras bebidas alcohólicas y que a menudo también dispone de mesas para los clientes.
-A poco. Es una expresión bastante difícil de entender pues lo mismo quiere decir de que utilice como respuesta a una oración previamente dicha, puede denotar sorpresa, por lo sería mas objetivo sustituirlo con "no me digas que..." o "no puedo creer que.. o "por "en realidad" o "en verdad".También se usa como ¿en serio?, ¡no te creo!, ¿de veras / verdad?, ¿no me mientes?, mostrando incredulidad.
-Cajón. Se emplea en lugar de gaveta confundiéndolo con el cajón corredizo que hay en algunos muebles, como los escritorios: en la gaveta se guardan objetos, ropa o papeles que se quieren tener al alcance. Aunque
cajón es en su mejor acepción una Caja grande, cuadrada o rectangular, sin tapa, y generalmente de madera, que sirve para guardar o llevar cosas pesadas
-Pendejo. Es alguien idiota o persona que lleva una vida irregular, viciosa y desordenada. Mientras tanto en cuba significa hombre cobarde y pusilánime.
-Castillo. Edificio o conjunto de edificios fortificados para la guerra con murallas, torres, fosos y otras fortificaciones. También es la parte alta o principal de la cubierta de una embarcación que comprende desde el palo trinquete hasta la proa. En México se denomina castillo a las columnas de una construcción.
-Trailer. Existen dos grandes acepciones de la noción. Un tráiler puede ser el remolque o el acoplado que lleva al arrastre otro vehículo. Esto se debe a que el tráiler carece de motor y de movilidad propia: está diseñado para acoplarse a la estructura de algún medio de transporte. Tráiler también es la denominación que reciben los avances de una película, un videojuego, una serie de TV o un libro. El tráiler consiste en un resumen o en un pequeño adelanto de la obra, que se difunde con fines de publicidad y promoción. En México se llama trailer a los camiones propiamente dichos y traileros sus choferes.
-Camión. Se emplea en lugar de ómnibus. Un camión es un vehículo motorizado diseñado para el transporte de productos y mercancías y no personas, mientras que el autobús, bus, ruta, colectivo, bondi, guagua, micro u ómnibus como se le llama en otros países, son los nombres más comunes del vehículo diseñado para transportar numerosas personas mediante vías urbanas. Generalmente es usado en los servicios de transporte público urbano e interurbano,y con trayecto fijo.
-Enseñáte. Se emplea en lugar de aprender que es llegar a saber una cosa por medio del estudio o la práctica.
-Panteón. Es el conjunto de todos los dioses de una religión o mitología politeísta particular, como los dioses del hinduismo, la mitología griega o la mitología nórdica. Desde el siglo XVI la palabra también ha sido usada en un sentido secular, refiriéndose a un grupo de gente exaltada. se refiere a un templo o edificio sagrado dedicado a todos los dioses de una religión politeísta particular. Salvo, en el caso de grandes monumentos, su significado actual es de edificación funeraria, normalmente en un cementerio o el monumento funerario destinado a la sepultura de varias personas, generalmente de la misma familia.
No es equivalente a cementerio, como se emplea en México.
Ni modo. Es el conformismo, por no poder cambiar las circunstancias de determinada situacion. En México se utiliza mucho y significa "no hay un modo", "no hay forma", "no hay solución", "¡ya que te queda!", "aceptalo", no hay de otra forma, no hay oportunidad). Es el único lugar donde se emplea.
-Coger. Sus sinónimos tomar, recibir, atraer, rocolectar,ocupar cierto espacio, hallar, encontrar, descrubir una mentira o un secreto o una falta, captar una emisión de radio o de televisión, atrapar, apresar, sorprender, alcanzar lo que está alejado, anotar lo que otro dice, atropellar, embestir, contraer una enfermedad, agarrar o asir y otros significados. En México se refiere al acto sexual, así que prefieren emplear agarrar en su lugar, que es la acepción menos adecuada, pues nadie las garras no responden a todos sus significados.
Pero esta es solo una pequeña muestra de las voces empleadas en México de forma cotidiana. El idioma tiene sus particularidades en cada país e incluso región, por lo que el español en latinoamérica no es posible neutralizarlo porque no se pueden borrar identidades, culturas, sabores, historia y todo lo que identifica y enriquece nuestra lengua.
Sin embargo, dentro de todo, tiene un papel de primer orden la educación. Y la educación en México la voy a retratar con un sólo y triste adjetivo: desastrosa.
Primero vamos a detenernos en analizar cómo era la educación antes de la colonización y cómo es ahora.
La Educación en las sociedades prehispánicas.
A partir no solamente de la lectura de novelas de ficción histórica, sustentadas en bases científicas de cómo era el mundo anterior a la conquista española, sino también de consulta de textos e investigaciones históricas, tenemos una visión bastante objetiva de la educación en esa época en el México actual, para lo que vamos a tomar la formación social más desarrollada: los aztecas.
El objetivo primordial de la educación entre los aztecas era la conservación de las tradiciones por medio de bienes culturales como costumbres, religión, lengua y conocimiento em general.
El padre se encargaba de educar al niño y la madre hacía lo propio con la niña, ambos en una tendencia bélico-religiosa y cada infante permanecía en casa hasta los catorce años cuando era trasladado a alguna institución pública, el Calmécac y el Telpochcalli, donde eran separados según su clase social.
En el Calmécac la formación era religiosa y funcionaba como internado, la duración del curso era de quince años con tres grados distintos. Unos llegaban a tlamacac o sacerdote e intelectualmente eran preparados en
religión, en la interpretación de jeroglíficos, la medición del tiempo, historia, operaciones aritméticas, astronomía y a distinguir plantas y animales. Con una disciplina muy rígida ya que dormían en lecho duro y recibían castigos severos. Las mujeres asistían al Calmécac femenino donde las doncellas permanecían hasta que se casaban.
Una cita de "El corazón de Piedra Verde" de Salvador de Madariaga, considerada como una de las mejores novelas históricas sobre la conquista del Nuevo Mundo escritas en habla española, explica detalladamente la dura preparación de los sacerdotes y nos habla del ejemplo de un estudiante enamorado al cual le imponen que para dominar los deseos sexuales, debía atravesarse el miembro con une espina de cactus conteniendo una cuerda o pita. Mientras más fuerte fuera el deseo, más gruesa la espina y más larga la cuerda.
Otras citas no menos convincentes nos muestra la novela europea más imaginativa y a la vez realista sobre la historia de la Conquista de México: "El Dios de la lluvia llora sobre México" de László Passuth, que aparte de la amplitud de conocimientos históricos del autor y más allá de la descripción basada en documentos auténticos de los acontecimientos, describe las particularidades de la desconocida cultura azteca. En Cortés, Passuth aprecia al hombre culto que se expresaba con elegante soltura, leía en latín y tenía muchos conocimientos jurídicos y económicos. Hace resaltar que pocos conquistadores tenían tanto interés verdadero por conocer la forma de vida y las costumbres de los pueblos que iban descubriendo, y tanto talento para describir en forma vívida lo que veían. Con todo esto, según Passuth, Cortés sobresalía entre los conquistadores en general, y no se le puede confundir con la masa inculta y rapaz de los mercenarios que lo acompañaban. Le simpatiza también el hombre enamoradizo, sensible a la belleza de las mujeres indias, y su valentía en las batallas.
El Tepochcalli preparaba a los futuros soldados. Les enseñaban a labrar la tierra y a sostenerse con las ganancias de la misma, en cuanto a conocimiento solo recibían instrucción religiosa. Lo concreto era mostrarles el arte de la guerra y les enseñaban a manejar la macana y el arco y sobre todo a pasar hambre, sed, cansancio, frío y humedad.
En la sociedad azteca también se enseñaban juegos y deportes, danza y música, canto, poesía, oratoria como punto importante en la educación. Quizás si analizamos la educación actual en México, salvando la distancia de los tiempos y la evolución de la sociedad, preparaban para la vida a los ciudadanos mejor que ahora.
El cuento de la "Reforma Educativa"
En 2012 se firmó el “Pacto por México” acuerdos para la creación de una sociedad de derechos y libertades, en donde resalta la educación de calidad y equidad, además se daría una reforma legal en materia educativa, teniendo como objetivos la calidad en la enseñanza y el beneficio de los docentes y la sociedad, pero al final esta tuvo un toque más administrativo y laboral, trayendo como consecuencia la jubilación anticipada de 27 mil maestros.
La Universidad Autónoma de México (UNAM) indicó que era necesario diseñar y contar con un paquete de opciones de actualización para la superación de los docentes, centrado en la renovación curricular, para que no solo los docentes sean beneficiados en su desempeño frente a un grupo, sino la sociedad misma. y que se hiciera con el objetivo de dignificar dicha profesión sin transgredir los derechos de los profesores y también mejorar la infraestructura física de los planteles.
Nada o muy poco de eso se cumplió, por lo que la Reforma ha sido ampliamente criticada y boicoteada por los maestros, que en buena medida han contribuido, sin quererlo a protestas y sublevaciones de otros sectores de la sociedad inconformes con la afectación que a sus derechos y nivel de vida han hecho las llamadas reformas que solamente han logrado incrementar el malestar social y la pobreza.
El hecho real es que la educación mexicana es obsoleta y para resolver esto no se ha dado un sólo paso, solamente combatir a esa horda que responde al nombre de maestros. No han sabido tomar los ejemplos de Finlandia, Nueva Zelanda, Singapur y otra decena de países que han modificado el viejo sistema memorista y basado en interminables tareas y utilización de Internet como suplemento de la memoria por un sistema verdaderamente participativo, donde prima el razonamiento y la participación conjunta de estudiantes y profesores en el aprendizaje. Cada vez que escucho en México decirle a un niño:¡enséñate! en lugar de ¡aprende! me hierve la sangre. Y que lo diga un maestro, peor todavía.
No se puede aspirar a que un país se desarrolle cuando la educación es un caos. La Reforma educativa se parece a los proyectos de Fidel Castro, que ninguno funcionó y terminaron en un fracaso. El habla popular se degrada en todos los países del mundo, pero de ello tiene una importante culpa la calidad de la educación.
El puntillazo de la OCDE.
El rezago entre los estudiantes mexicanos y los de países miembros de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) es de dos años de escolaridad, por lo que México es el país con el peor desempeño en matemáticas, lectura y ciencias.
A México le tomará más de 25 años alcanzar el nivel promedio de los 34 países de la OCDE en matemáticas y más de 65 años en lectura, pues actualmente, un estudiante mexicano con el más alto rendimiento apenas logra obtener el mismo puntaje que un alumno promedio en Japón, mientras que el el 55% de los alumnos mexicanos no alcanza el nivel de competencia básico en matemáticas, lo mismo ocurre con el 41% en lectura y el 47% en ciencias.
México se ubica en último lugar entre los países de la OCDE y en el sitio 53 de entre los 65 países que participan en la prueba, pero no hay que preocuparse, aparte de que ninguno de los que leemos esta información veremos ese momento por los decenios que restan para cumplirse, la reforma educativa se encargará, si no es modificada de que esas cifras sean aún peores, si es que ello es posible.
El 90% de los jóvenes de 15 años están escolarizados en la mayoría de los países de la OCDE, pero en México el índice es de menos de 70%.
El gasto público en educación.
Ello es resultado de que el gasto público en educación en México es bajo. La inversión en este rubro está alrededor del 5 por ciento del PIB, por lo que el presupuesto por alumno es insuficiente. Gabriela Ramos, consejera especial del secretario general de esta organización, José Ángel Gurría, dijo que el gasto total de México por estudiante es uno de los menores de los países que conforman el organismo.
También México es el país de la OCDE con el promedio más alto de estudiantes por profesor con 32 alumnos por cada docente, cifra que es más del doble del promedio de la organización. El porcentaje de mexicanos con educación superior, aún está lejos del promedio de la OCDE. Y desgraciadamente, cuando hay que recortar el presupuesto, se recorta primero educacion y salud pública, mientras que los gastos del congreso, presidencia, y otras instituciones estatales o no se tocan o se incrementan sustancialmente. Y por si fuera poco, está el avión presidencial.
El avión de Peña Nieto, un lujo que no lo tiene ni Obama.
Considerado como el avión presidencial más caro del mundo, el Boeing 787-9 Dreamliner, exclusiva para el Jefe del Ejecutivo federal y su equipo, costó unos 7 mil 520 millones de pesos o sea unos 576 millones de dólares.
El costo de este avión desató polémica desde 2012, cuando el entonces Calderón inició las negociaciones de compra con la empresa estadounidense Boeing. Adicionalmente, se prevé un gasto de mil 170 millones 378 mil pesos por concepto de mantenimiento. Los recursos que se gastarán en la compra de la aeronave, superan al gasto anual del al menos 17 congresos estatales y es superior a los presupuestos que recibieron las secretarías de Energía, de la Función Público, de Turismo y del Trabajo y Previsión Social este año.
Con el costo de este lujoso avión se podría pagar:
- Casi medio millón de tablets para los alumnos de escuelas públicas.
- 250 millones de kilos de huevo, para aliviar la hambruna de los más pobres.
- Pagar 1 mes de salario mínimo a 3 millones de trabajadores, O la anualidad de 250 empleados.
-El costo de la canasta básica que consta de 85 productos, que incluyen verduras, frutas, cereales y para consumir 2 veces carne a la semana para 4 millones de familias, y anualmente alcanzaría para alimentar a 350 mil familias. Si en México el salario promedio es de un dólar la hora y el ingreso promedio de los hogares mexicanos es de 144 mil pesos al año, aproximadamente, lo que se gastará en el avión sería suficiente para mantener un hogar durante 450 mil 571 años.
Pero a los políticos, estos números no se les ocurre ni verlos, mucho menos analizarlos.
Pobreza y desigualdad en México.
México es la economía número 15 por volumen de PIB.
El PIB per cápita es un muy buen índicador de la calidad de vida y en el caso de México, en 2015 se sitúa en el puesto 72 del ranking y sus habitantes tienen, según este parámetro, un bajo nivel de vida en relación al resto de los 196 países.
En cuanto al Índice de Desarrollo Humano o IDH de México, que elabora las Naciones Unidas para medir el progreso de un país, fue de 0,756 puntos en 2014, con lo que se situó en el puesto 74 de la tabla de 187 países que publicamos.
Si a eso le sumamos la inseguridad, de la que se conoce ampliamente en el mundo y cuya muestra es que de las 10 ciudades con el mayor número de homicidios por cada 100.000 habitantes México cuenta con el cuarto lugar que es Acapulco, y en esta triste relación también se encuentran Chihuahua, Cuernavaca, Juárez, Nuevo Laredo y Torreón. Estos datos son de 2015, los de 2016 serán peores por el aumento de la violencia y la inseguridad en el país.
En un país donde la educación y los servicios sanitarios, entre otros, todavía dejan mucho que desear, la desigualdad en el ingreso, una de las mayores del mundo, va aparejada de una desigualdad equivalente en la calidad de vida. Paradójicamente, sin educación de calidad y buenos servicios básicos se antoja difícil revertir este grave problema.
Como dijo un famoso periodista mexicano: México es una fábrica de pobres.
Esta es la única fábrica que funciona a la perfección en México. Las políticas públicas van y vienen y no consiguen detener que crezca el número de pobres. No hay ningún combate efectivo a la pobreza, a pesar de que los gobiernos lo cacarean.
En México ni la salud, ni la educación los empleos y los servicios cumplen los requisitos de:
el acceso a todas las personas en todos los lugares en cualquier momento
la disponibilidad en cantidad suficiente para todas las personas independiente de su posición social
la calidad en los servicios de salud, empleo digno y que sean de calidad y para todos
la aseguibilidad para poder pagar necesidades esenciales de los derechos humanos, como la alimentación, la vivienda y atención de salud y educación
La ignorancia y la incultura del Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, ocupan la atención de los medios de comunicación masiva. Su ignorancia e incultura son patentes, pero también su incapacidad para afrontar aceptablemente situaciones inesperadas que ni siquiera son de las más complejas, pero sí en ambientes o circunstancias en las que él no tiene el control absoluto.
Esto último es incluso más grave que su ignorancia e incultura, pues una de las responsabilidades fundamentales de un presidente es precisamente resolver problemas complejos, diversos, mutantes y, en muchas ocasiones, inesperados. La economía va en picada, la inseguridad y la violencia crecen, ha habido numerosos escándalos de corrupción y su administración ha estado plagada de conflictos de interés, amiguismo y falta de resultados.
Encima de eso se le ha formado una especie de revolución en contra de la llamada Reforma Educativa.
Dirige la Reforma educativa un tipo que sabe nada de educación.
¿Qué ha hecho Peña Nieto por la educación y la cultura del país? Parece que nada. O quizáslo que ha hecho es empeorarla.
Enrique Peña Nieto ha llevado a la educación al peor momento de su historia; los padres de familia, maestros y alumnos, están secuestrados por la CNTE, no hay ni drenaje ni baños ni pizarrones en las escuelas, si la Reforma Educativa fue, es y será un rotundo fracaso.
Y parte de ello es que el presidente tiene un nivel académico, cultural y hasta intelectual tan bajo, que seguramente quiere comparar a los Premios Nobel o Príncipe de Asturias con los reconocimientos de TV y Novelas.
Aparte de leer TVyNovelas, TVNotas y la revista Hola, no creo que se haya leído algo más en su vida.
Recuerden las preguntas que le hizo la prensa en la Feria Internacional del Libro que tiene lugar en Guadalajara.
“Definitivamente la Biblia es de ellos”, contestó Peña Nieto. “No la leí toda”, agregó. Pero de ahí en adelante, el exgobernador del Estado de México pasó fatigas para recordar títulos o autores. Atribuyó a Enrique Krauze la autoría de La silla del Águila, de Carlos Fuentes, y dijo que sí revisó “ese de caudillos” de Krauze (Siglo de Caudillos, de Tusquets), para enseguida también mencionar que leyó el que habla de las “mentiras” de ese libro del historiador. También habló de la trilogía de Jeffrey Archer y otro de Enrique Serna sobre el dictador del siglo XIX Antonio López de Santa Anna.
“Mira, realmente no podría señalar libro que marcó mi vida”, contestó. Actualmente, dijo, leo el que se llama La inoportuna muerte del presidente, y le pidió a su staff que le recordara el nombre del autor, pues dijo que cuando pone a leer olvida de autores o títulos. Más inculto no puede ser él y sus asesores que no fueron capaces siquiera de prepararle para la pregunta inevitable en una Feria Internacional del Libro.
Y encima de eso Carmen Aristegui demostró que es un plagiador, sumándolo a su anterior denuncia de corrupto con el escándalo de la Casa Blanca.
La Universidad Panamericana de México admitió que el presidente Enrique Peña Nieto cometió plagio en su tesis de licenciatura de la carrera de Derecho, pero no puede sancionarlo porque su reglamento no es aplicable a exalumnos. El portal de internet Aristegui Noticias, señaló en una investigación que el 29 % de la tesis de Peña Nieto proviene de textos de, al menos, una decena de autores a los que no cita correctamente o ni siquiera menciona en la bibliografía del trabajo. En total, 197 de sus 682 párrafos provienen de textos de, al menos, una decena de autores a los que el presidente no cita o ni siquiera menciona en la bibliografía del trabajo, añade.
Pero Peña no es único troglodita, veamos esta cita de José Emilio Pacheco.
“Escribo y eso es todo. No leemos a otros: nos leemos en ellos. Me parece un milagro que algún desconocido pueda verse en mi espejo. Si hay un mérito en esto. Creo que ya todos estamos conscientes y cansados, más cansados que conscientes, de lo que resulta verosímil: México no lee. Nada. Cero. El mexicano es un ser alérgico a las páginas y a lo que hay dentro de ellas, bibliofóbico, renuente a la cultura, ¡al pueblo pan y circo! No, no queremos leer pero chido tu cotorreo; y ¿ser escritor? Gracias pero no gracias, del aire no se vive. Sobre esta línea me puse a investigar, tal vez porque mantengo la esperanza de que el cliché del México inculto sea más un chisme que una realidad, he aquí lo que encontré: la verdad de la verdad, es que ésta siempre duele. A mí me dolió”.
El estudio “Hábitos de lectura” realizado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Reveló a los países que más libros leen por año, el que mayor comprensión lectora tiene, las preferencias de los compradores y el impacto social que este hábito genera. ¿Leer genera cambios? o ¿los cambios generan lectores? Lo dejo a su criterio.
En el año 2012 México se situó en el lugar 107, ¿de cuántos países? ¡Ah bueno, de 108. El mexicano promedio lee 2.8 libros al año, sólo 2 por cierto de la población lee regularmente, y 48 por ciento nunca ha entrado a una librería, 91 por ciento de los mexicanos encuestados dicen que “no tienen tiempo” (es que la telenovela está buenísima). Para darnos una idea más clara del problema, la misma cantidad de mexicanos que no leen es inversamente proporcional en el país que encabeza la lista: Suecia, con 98 por ciento de población lectora. Analicen el nivel y calidad de vida del sueco y del mexicano.
Cortés, la Malinche y Octavio Paz son los culpables.
Volviendo a Cortés(siempre está presente aunque los mexicanos lo desprecien, México no puede desligarse de Cortés aunque quiera).
Los mexicanos emplean una palabra, malinchista, que indica amor o preferencia por lo extranjero. Por ejemplo, el niño que lleva a la escuela unas zapatillas de deporte nuevas y son americanas, por el hecho de estar fabricadas en Estados Unidos las convierte en mejores a sus ojos.
Malinchista proviene de la Malinche, Malintzin, una de las indígenas que regalaron a Hernán Cortes cuando llegaron al actual territorio de México en 1519. La Malinche destacó porque sabía hablar náhuatl, el idioma de los aztecas. Fue un personaje destacado en las guerras de Cortés por hacerse con los nuevos territorios. Traducía y aconsejaba. La Malinche fue clave en las alianzas que estableció el extremeño con los pueblos locales, las tribus que luego le ayudarían a derrocar al imperio de los mexicas. Pese a ser uno de los personajes más destacados en la historia que comparten México y España, la Malinche apenas aparece en los libros de texto escolares. La historia es la historia aunque uno no quiera. Lo más que puede hacer es lo que hacen los gobiernos comunistas: reescriben la historia, entonces los villanos serán casi santos, los santos unos villanos y otros parecería como si nunca hubieran existido.
Otra deficiencia importante del sistema de enseñanza mexicano es que no profundizan en la historia prehispana y la conquista la muestran como una masacre a unos pobres e infelices indios indefensos y nobles. Una familiar política de mi hijo, de 11 años, no sabía quien era la Malinche, malamente quien era Hernán Cortés y no podía identificar en el mapa ni a Guatemala ni a Cuba, los países más cercanos a Cuba aparte de Estados Unidos. De ellos sólo sabía decir que eran unos gringos que le habían robado a México su territorio y por eso eran ricos.
“Nos conquistaron”, ha dicho algún que otro alumno a sus maestros de secundaria y preuniversitario en México. Los maestros responden: “¿Eres un indígena del siglo XVI para que te conquistaran?”. La política del olvido se ve reflejada en las respuestas de los escolares. No conocen a profundidad sus raíces.
En México la Malinche es el “chivo expiatorio”. Una mujer que regalan como esclava sexual y que luego "traiciona" porque ayuda a Cortés en la conquista. En esta narrativa que nos han tratado de vender como la construcción del estado nación, ella es identificada como un personaje traidor. Es fácil hacerlo. Y tiene mucho que ver con el hecho de que sea mujer y tiene mucho más que ver con El Laberinto de la Soledad, de Octavio Paz y el término "chingada”, una de las pocas palabras de uso común en México que aluden a la conquista, chingar. Aunque tiene cantidad de significados dependiendo de su uso, uno, hijo de la chingada, alude directamente a la Malinche, la chingada, la violada por Cortés. Aguirre lo refiere con ironía: “Bueno, ¿cómo se puede explicar a la gente que nosotros mismos, refiriéndose a los distintos pueblos y culturas que poblaban el actual territorio de México, nos traicionamos? ¡Por supuesto que la explicación de Octavio Paz, no es justa, nosotros no nos traicionamos, es que ella (la Malinche) nos traicionó”.
Octavio Paz, ese gran desconocido en México, víctima tanto de la incultura de su pueblo como de la naturaleza del mexicano, Paz descubrió que cada hombre oculta algo desconocido; por eso describe su libro como una confesión, una declaración de su personalidad y de la del mexicano.
El Laberinto de la Soledad" es una obra que expresa una preocupación, una pasión compartida por muchos, donde Paz describe al hombre mexicano como un "macho" que se encierra, un hombre solitario cuya mayor debilidad sería abrirse, tanto a los otros o a sí mismo, un ser que es completamente diferente a la mujer, ella es "débil" porque se abre, es un ser vulnerable y obediente.
Sin embargo, descubre que existe en México y en el mexicano una característica que muestra la necesidad que los mexicanos tienen por abrirse, por salir al mundo: las fiestas, cualquier pretexto, cualquier celebración es suficiente para hacer una fiesta, ese lugar en donde los amigos lloran, confían, cantan, se emborrachan y se enamoran.
Y una gran definición:
"Al reflexionar sobre la extrañeza que es el mexicano descubrí una vieja verdad: cada hombre oculta un desconocido, cada hombre está habitado por un fantasma; quise entrar en mí mismo y desenterrar a ese desconocido, hablar con él. El mexicano, discreto y cortés, a ratos hosco y otros reservado, de pronto se abre al mundo y muestra un rostro desconocido, es el mismo de siempre y es otro, expresión desconocida, nueva, alegría o tristeza, explosión de júbilo o alarido de pena, estamos ante lo que he llamado la dialéctica de lo cerrado y lo abierto, ante el choque entre la forma cerrada sobre sí misma y la energía interior que la hace estallar."
Y encima de eso el intelectual fue una y otra vez a la carga al denunciar las limitaciones y excesos de la praxis autodenominada cristiana, algo que tampoco le perdonaron los voceros religiosos. Su visión histórica, asumida durante años de análisis y reflexión, es muy mesurada al advertir los extremos a los que llegó en México la lucha por la laicidad y la separación efectiva entre el Estado y la Iglesia católica
Por eso mismo, por definir al mexicano como es, Octavio Paz, es un desconocido en su país, quizás ese 2% que lee sí lo conozca y algún otro escuchó alguna vez que había ganado el Premio Nobel de Literatura en 1990. Casi nada, pero ese hombre los muestra como contradictorios, dispares, festivos, brutales, escépticos, cerrados pero a la vez abiertos, mágicos pero a la vez incrédulos, creyentes pero a la vez pesimistas, el México de las muchas máscaras y las fiestas, el México producto de una violación como lo fue la conquista y lo que eso significó en la psique de los habitantes de este país que abrazó el catolicismo como una balsa de salvación ante la pérdida de la historia, el orgullo, el idioma y el entorno por supuesto después de la destrucción.
Puede que Octavio Paz sea una reencarnación de la Malinche.
La dolorosa realidad de la educación y la cultura en México es el resultado de la mezcla de miseria y desigualdad, incompetencia, cinismo, y corrupción de la sociedad mexicana.
Andrés Oppenheimer, el destacado periodista y escritor argentino en su libro ¡Basta de historias! describe la obsesión latinoamericana con el pasado que es característica de la región y que no ha observado el mismo fenómeno en sus viajes a China, India y otras naciones de historia milenaria.
Esta obsesión con la historia, se pregunta el autor, “¿Nos ayuda a prepararnos para el futuro? ¿O, por el contrario, nos distrae de la tarea cada vez más urgente de prepararnos para competir mejor en la economía del conocimiento del siglo XXI?”
Podría buscar citas y filosofar eternamente sobre las deficiencias educativas en México, pero eso no contribuirá en nada a que ello mejore. No puedo llegar desde Cuba a descubrir el agua tibia o el café con leche. En México, por suerte hay suficientes cerebros que han señalado, a través de toda su historia, la importancia de solucionar este problema. Pero el mismo pueblo elige gobiernos, a todos los niveles, que lo único que hacen es robar, asesinar y reprimir.
Mis primeros contactos con México fueron a través de la lectura. Me apasionaban las historias de la conquista, de la vida de los pueblos autóctonos de América, y mis primeros libros eran casi exclusivamente publicados en México, cuando el país, dada la extensa producción editorial, supongo que era de los mayores lectores de América. Grijalbo, Fondo de Cultura Económica, Planeta, La Prensa, eran verdaderos líderes en la industria.
En mi primer viaje a México asumí que disfrutaría entrando y comprando lo que pudiera en cientos de librerías de libros de uso. No encontré ni una, y el precio de los libros, como ahora, era prohibitivo.
Penosamente eso también está en el pasado, y parece que igualmente, muchos no sienten nostalgia de ello.
He escrito reiteradamente sobre todos los problemas que tiene Cuba y su gobierno. La falta de libertades en todos los ámbitos de la vida juega un gran papel en ellos. Pero en el tema educación, no sólo me ha escandalizado el abismo entre Cuba y México. Un país pequeño y pobre da una educación de calidad y obtiene un título universitario el que tiene aptitudes y así lo desea. En México la educación es deficiente en todos los niveles, salvo honrosas excepciones y pese a ser un país grande y rico. No necesariamente estudiar en una institución privada brinda educación de más calidad.
Tengo una amiga cubana en Guadalajara que lleva más de 15 años en México. Es graduada de la Universidad de La Habana en Lengua y Literatura Española y tiene una maestría. Imparte clases de español en dos escuelas: una pública y otra de pago. Me cuenta que los alumnos de la escuela pública tienen más interés en aprender que los malcriados de la que se paga. Y para qué hablar de los tragos amargos que ha debido pasar para aprender el español de México, porque según ellos, ese es el verdadero, no el de la Real Academia de la Lengua.
No digo más nada, ahí está la explicación de por qué México, un país de enormes riquezas naturales, tiene tan pobre riqueza espiritual: porque no cultiva ni le da el lugar que merece la educación. Le interesa más el pasado que lo que será de su país en el futuro. Y de la ortografía mejor ni hablar, eso no se conoce en México, pero cuidado, los mejicanos nunca pierden, recuérdense "Jalisco no te rajes" donde Jalisco nunca perdía.
¡Hombre de máscaras el mexicano! como diría Octavio Paz. Más conocido en el mundo que en su tierra, que proclamó sabiamente: "La libertad no necesita alas, lo que necesita es echar raíces". Octavio Paz no era de los que lloraban con lágrimas, sino con el pensamiento. Parece que va a seguir así por un buen tiempo.
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